Hernia Crural y sus complicaciones en el canal femoral

Una hernia es un levantamiento en cualquier órgano o tejido, este levantamiento sobresale del lugar donde el órgano o tejido se encuentra alojado. Las hernias más comunes se producen en la cavidad abdominal, este es el caso de la hernia crural la cual comentaremos a continuación.

Hernia crural

¿Qué es una hernia crural?

Una hernia crural o bien hernia femoral, es una protrusión ubicada en la cavidad abdominal o bien hacia la zona de la pelvis que se produce por un punto débil del conducto crural en el cual pasan la arteria y la vena femoral. Este punto débil por lo general es causado por un debilitamiento en la pared abdominal. Esta hernia es muy común en mujeres y una de sus consecuencias más frecuentes es el estrangulamiento de un asa del intestino delgado.

Dentro de todos los casos hernias conocidas, solo se presenta entre el 2 y 5 % y su único tratamiento es la intervención quirúrgica. Esta hernia puede ser visible como un abultamiento de forma oval en la parte superior del muslo y no suelen ser dolorosas, por lo general no se necesitan de otras pruebas para el diagnóstico de la hernia crural.

Causas de la hernia crural

La gran mayoría de las veces, se desconoce la causa de una hernia y esto aplica para la hernia crural. Muchas de estas pueden ser de carácter congénito pero no suelen ser fáciles de ver en el bebe pero a medida que crezca se hará más fácil de ver. Se conocen diversos factores que contribuyen a que se desarrolle una hernia crural y estos son:

  • Estreñimiento de carácter crónico
  • Tos crónica
  • Hacer fuerza excesiva para levantar o mover  objetos pesados
  • Obesidad
  • Esfuerzo excesivo para orinar por causa de una próstata agrandada

Hernia crural

Síntomas

El principal síntoma vinculado con la hernia crural es una protuberancia en la parte superior del muslo por lo general ubicada por debajo de la ingle. Fuera de esto, no es frecuente que este tipo de hernia produzca síntomas, probablemente sienta  una leve molestia a nivel inguinal, la cual puede ser un poco intensa si usted se encuentra de pie o hace algún esfuerzo físico para levantar o mover un objeto pesado.

Existen situaciones en la que la hernia podría obstruir al intestino delgado, ya aquí la hernia representaría una emergencia para usted, los síntomas que se presentan en esta ocasión son:

  • Dolor inguinal de manera reiterada
  • Dolor abdominal
  • Náuseas
  • Vómitos

Diagnóstico y tratamiento

A pesar de que las hernias de la zona abdominal son de las más frecuentes, en el caso de la hernia crural es complicado su diagnóstico, puesto que es un tipo de hernia poco común y difícil de detectar. Lo que el médico necesitara para el diagnóstico será la historia clónica y una exploración física acostado boca arriba y de pie, estos dos factores en conjunto le harán más fácil el reconocimiento de factores que influyen en el diagnóstico de estas hernias los cuales son:

hernia crural

  • El tiempo de evolución.
  • Diferenciar entre la hernia inguinal y hernia crural.
  • Si existe dolor mientras se este de pie o durante la palpación, en caso de ser así, la intensidad, es decir, si el dolor es leve, moderado o intenso.
  • Que tanta incapacidad le genera la molestia de la hernia.
  • Antecedentes personales médicos y quirúrgicos y medicación que actualmente toma el paciente.
  • Factores que agraven la situación de la hernia como presión intra-abdominal elevada, obesidad, cirrosis y diálisis peritoneal, edad avanzada, tiempo de evolución y tipo de la hernia.

Tratamiento de estas hernias

Se pueden presentar complicaciones en caso tal no se trate la hernia crural con una cirugía, estas pueden ser el atascamiento o la estrangulación. Cuando hablamos de atascamiento, es cuando la hernia sobresale y no produce dolor alguno, está muy vinculada a la obstrucción del intestino, mientras que con estrangulamiento hablamos de la situación en la que la hernia se atasca con los intestinos y crea mayor complicación.

Se recomienda la cirugía en las hernias crurales para evitar en la medida de lo posible el estrangulamiento causado por las mismas. Los métodos más usados para intervenir quirúrgicamente a este tipo de pacientes son vía hernioplastia que es una cirugía abierta o bien vía laparoscópica que es cerrada. La elección del método depende del médico y del estado del paciente.

Cuando se trata de una operación abierta, esta consiste en realizar una incisión sobre el lugar de la hernia, extraer la hernia y reparar la zona debilitada del musculo abdominal con una malla. Cuando se procede con la técnica de laparoscopia, se hacen uso de pequeñas herramientas que son introducidas en el abdomen del paciente para retirar la hernia y reducir los puntos de sutura en comparación con la operación abierta.

Derivación a cirugía

Ahora bien, siendo un poco más específicos, la cirugía de hernia crural consiste en reparar el tejido de la hernia ubicado en el conducto crural, por lo general este tejido obstruye al intestino o bien lo empuja hacia afuera a este órgano y es lo que se puede ver durante la exploración física. Por lo general, el tejido por el que esta compuesto la hernia es el mismo del intestino.

En esta cirugía se procede a empujar hacia adentro el tejido de la hernia, como comentamos, esta se produce por un debilitamiento de la musculatura abdominal. Una vez reparada la hernia, se procede a fortalecer la zona abdominal debilitada con sutura o con una malla. A continuación detallaremos los métodos usados para esta cirugía.

Cirugía abierta

Inicialmente al paciente se le suministrará una anestesia general para no sentir dolor o molestia alguna durante el procedimiento quirúrgico. Podría también usarse un anestésico local el cual dormiría solo de la cintura hacía abajo, igualmente usted no sentirá ni dolor ni molestia alguna.

Una vez que haga efecto la anestesia, el médico procederá a realizar una incisión en la zona de la ingle. Esto permitirá localizar la hernia y luego se separarán los tejidos que rodeen la hernia crural, una vez hecho esto, la hernia es empujada hacia el interior del abdomen. Para reparar el debilitamiento en el abdomen, el cirujano procederá a suturarlos para evitar futuras hernias en el mismo lugar.

Es importante mencionar que en la actualidad la tecnología ha permitido hacer uso de mallas las cuales se unen en la pared abdominal y estas tienen la función de fortalecer esta zona y así evitar la creación de nuevas hernias. Para dar por finalizada a cirugía, el médico procederá a cerrar la abertura en la zona inguinal con sutura.

Cirugía laparoscópica

En este caso, se procede a administrar anestesia local, puesto que es una cirugía más sencilla y menos dolorosa que la abierta. El cirujano realizará de 3 a 5 cortes mínimos en la zona de la ingle y en la parte inferior del abdomen. Por estas incisiones se introducirá el laparoscopio, este es una sonda delgada en la cual está incorporada una cámara y una luz que le permitirá al cirujano ver la parte interna de su abdomen mientras opera.

Para realizar la operación el médico procede a introducir sus instrumentos quirúrgicos por las incisiones hechas previamente. Con estos buscará reparar la hernia empujándola hacia adentro y suturar o bien introducir una malla en su abdomen para fortificar la zona y evitar más hernias a futuro. Una vez terminado el procedimiento, el médico retira sus instrumentos y el laparoscopio y se suturan las pequeñas incisiones, de estas suturas son muy pequeñas las cicatrices.

¿Por qué es necesaria la cirugía?

A pesar de que esta hernia no cause síntomas o molestias considerables en la persona, debe ser operada debido a que puede producir una obstrucción o bien un ahorcamiento del intestino. Este ahorcamiento puede llegar a cortar el flujo de sangre a los intestinos, este hecho grave podría causar una necrosis (muerte del tejido) en el intestino y para tratar esta complicación es necesaria una cirugía de emergencia.

Riesgos

Los riesgos en torno a esta cirugía son pocos y todos ellos dependen de la experiencia y experticia del cirujano, a continuación comentaremos los riesgos que podría traer la cirugía de hernia crural.

  • Daño en los vasos sanguíneos que irrigan la pierna
  • Deterioro de un nervio cercano
  • Posible daño a órganos genitales cercanos de la incisión, sería aplicable para las mujeres nada más.
  • Dolor
  • Retorno de la hernia

Preparación previa a la cirugía

En caso de que la operación de la hernia crural sea electiva, muy probablemente su médico le indique que debe dejar de tomar anticoagulantes al menos 5 días previos a la operación. Esta medida es con el fin de disminuir los riesgos de hemorragia durante la intervención quirúrgica.

Recuperación de la cirugía

Usualmente esta cirugía suele ser ambulatoria, es decir, no requiere de hospitalización así que el mismo día de la operación usted podría irse a su casa. En caso de que la cirugía haya sido de emergencia ahí si requerirá de hospitalización para evaluar la evolución de la zona afectada por la hernia luego de la cirugía

Es frecuente que después de la cirugía el paciente sienta hinchazón en la zona debido al trauma de la cirugía y a la anestesia misma, también podría tener algún hematoma o dolor en el lugar de la incisión.  Por lo general su médico le recomendara tomar analgésicos y ser cuidadoso en sus movimientos, entre otras recomendaciones que podría hacerle su médico son:

  • Podrá realizar actividades ligeras después de la operación pero debe evitar realizar esfuerzos físicos e intentar mover o levantar objetos pesados.
  • Se deben evitar actividades que provoquen presión o tensión en la zona de la ingle, se le recomienda al paciente moverse lento cuando pase de estar acostado a sentado.
  • Evite estornudar o toser con fuerza.
  • Se recomienda ingerir muchos líquidos e ingerir alimentos ricos en fibra para evitar los episodios de estreñimiento.

Como pudimos conocer en este artículo, las hernias crurales son poco frecuentes y no producen mayor molestia a no ser que se produzca un estrangulamiento del intestino causado por la misma hernia, hecho que es poco frecuente. El único tratamiento en torno a este padecimiento es la intervención quirúrgica y recuerde siempre consultar a un profesional de la salud en caso de presentar molestias o bien padecer alguno de los síntomas mencionados en este artículo. También  te pueden interesar los siguientes artículos: