Venlafaxina: Indicaciones, efectos, información y más

La Venlafaxina es un medicamento orientado para controlar la depresión y trastornos de ansiedad, sociales y ataques de pánico, el cual cuenta con un mecanismo de acción caracterizado por ser un inhibidor de la recaptación tanto de la serotonina como de la noradrenalina. Aprende sobre este fármaco en este artículo informativo, evitando siempre la automedicación.

Venlafaxina

¿Qué es la Venlafaxina?

La Venlafaxina es un antidepresivo que actúa dentro del organismo de los pacientes mediante una acción prolongada, inhibiendo la recaptación de la serotonina y de la noradrenalina, como sustancias que se encuentran presentes en el cerebro de los seres humanos.

La serotonina es una sustancia química que funciona como neurotransmisor dentro del cuerpo humano, conocida por muchos como la hormona de la felicidad, en virtud de que su adecuada regulación permite a las personas manejar adecuadamente sus estados de ánimo, el funcionamiento de su digestión, su memoria, comportamiento, deseos y funciones a nivel sexual.

Cuando una persona sufre de trastornos depresivos, en muchas ocasiones se debe a que experimenta desajustes a nivel de la serotonina dentro de su organismo.

Por otro lado, la noradrenalina es una hormona presente en el sistema nervioso central, formado por el cerebro y la médula espinal; pero que también está presente a nivel periférico, donde se encuentra asociada con los nervios tanto de tipo sensorial, como craneal o espinal.

Venlafaxina

La noradrenalina actúa también como neurotransmisor y participa dentro de muchas funciones del organismo humano, como es el aumento de la presión arterial o el ritmo cardíaco, entre otras.

Al ser un neurotransmisor, tiene acción prácticamente dentro de todas las regiones del cerebro humano, al igual que dentro del sistema endocrino, justamente el que se encarga de la fabricación de las hormonas, que son los mensajeros de tipo químico que están presentes en el organismo.

Como mencionamos inicialmente, la Venlafaxina es un medicamento empleado para el tratamiento de la depresión, mediante la inhibición de la recaptación de serotonina y noradrenalina, lo que en términos médicos se abrevia mediante las siglas IRSN.

Este mecanismo es una forma de acción de algunos tipos de fármacos, los cuales actúan de manera selectiva sobre estas sustancias presentes dentro del cerebro, con la finalidad de mantener bajo un nivel adecuado su cantidad y compensándolas en caso de ser necesario, como parte del tratamiento a los pacientes que sufren patologías identificadas como trastornos nerviosos.

Es antidepresivo, por tratarse de un medicamento de carácter psicotrópico que puede producir acción sobre el sistema nervioso central del paciente, con la finalidad de ocasionar ciertos cambios temporales en su comportamiento al percibir las situaciones que se presentan en su vida, y con ello se mejor su estado de ánimo, conciencia, conducta y se evita que sufran depresión.

¿Para qué sirve?

La Venlafaxina es un antidepresivo que puede ser empleado para el tratamiento de la depresión, ansiedad y algunos otros trastornos asociados con alteraciones del sistema nervioso; es un medicamento ampliamente reconocido desde el año de 1993, cuando fue presentado al mercado por la compañía farmacéutica Wyeth de los Estados Unidos.

Posteriormente se comercializó a gran escala por los laboratorios Pfizer, también estadounidenses y desde entonces es uno de los medicamentos más vendidos, mediante recetas médicas, para hacer frente a los trastornos depresivos de los pacientes en esta nación y en muchos otros lugares del mundo.

La Venlafaxina actúa aumentando los niveles de serotonina y norepinefrina presentes dentro del cerebro, para ayudar con ello a mantener el equilibrio mental en pacientes con depresión, trastornos de ansiedad generalizada, ansiedad social, pánico y todas aquellas manifestaciones anormales producidas por alteraciones del sistema nervioso central.

Entendiéndose como depresión a una enfermedad donde el paciente manifiesta síntomas de estar agobiado por una profunda tristeza, con poco ánimo, pérdida de interés por la vida, baja autoestima y una serie de alteraciones adicionales, que le hacen estar incapacitado para asumir sus funciones psíquicas de manera normal.

Con ansiedad generalizada, se hace referencia a aquellas personas que sufren de una excesiva preocupación, la cual no pueden controlar y por lo tanto viven siempre agobiadas ante las situaciones que se presentan a su alrededor.

Mientras que el Trastorno de ansiedad social, está tipificado como un excesivo temor que invade a la persona, lo que le hace difícil controlarse cuando está en compañía de otras, lo que termina por hacerle sentir un incontrolable temor.

Por último, cuando se habla de pánico como otra de la manifestaciones que pueden ser controladas mediante tratamiento con la Venlafaxina, se hace referencia a los ataques súbitos e inesperados que pueden presentarse en un paciente como síntomas de su enfermedad, los cuales le producen un miedo intenso, además de mucha preocupación.

Advertencias y precauciones de su uso

La Venlafaxina es un antidepresivo, pero a la vez está considerado como un psicofármaco que es indicado para el tratamiento de los trastornos depresivos y diversas conductas ansiosas de los pacientes, manifestadas como alteraciones de tipo nervioso.

Como se comentó antes, este medicamento es parte de la categoría de los inhibidores selectivos de la recaptación de serotonina y noradrenalina, con funciones similares a los antidepresivos tricíclicos, que son otros de los medicamentos basados en los trastornos de ánimo, pero que impiden directamente la recaptación de los elementos anteriormente mencionados.

La Venlafaxina no interfiere con los receptores identificados como histaminérgicos, muscarínicos ni alfaadrenérgicos; por lo que se considera que no ejerce en los pacientes efectos secundarios de tanta intensidad, como otros medicamentos de acción hipnótica o sedante; los cuales pueden alterar el sistema cardiovascular de las personas.

Venlafaxina

Pero de igual manera se debe estar atento al uso de este tipo de fármaco, ya que se trata de un psicotrópico que puede ocasionar adicción y cuyo contenido podría tener efectos no deseados en muchos pacientes, especialmente aquellos que sufren de otras enfermedades o toman medicamentos que puedan repotenciar o disminuir los efectos de la Venlafaxina.

Con base en lo anterior, resulta necesario que se evite en la medida de lo posible su uso en pacientes que tenga un historial clínico de problemas cardíacos, o hayan sufrido de convulsiones con anterioridad.

Mientras que en otros casos este medicamento debe ser empleado bajo estricta vigilancia médica, con pacientes que puedan tener patologías asociadas con glaucoma, trastornos de bipolaridad, antecedentes de trastornos hemorrágicos, alteraciones de presión arterial, ancianos, menores de 18 años, diabéticos y algunas otras enfermedades que deben ser monitoreadas por el médico tratante, cuando se indique el uso de la Venlafaxina.

Marcas Comerciales de la Venlafaxina

Teniendo claro que la Venlafaxina es un medicamento capaz de elevar las concentraciones de serotonina al igual que de noradrenalina, dentro del cerebro de los pacientes a los cuales les es indicada como tratamiento. Este tipo de medicamento se puede encontrar identificado por marcas comerciales como Arafaxina, Conervin, Dislaven, Dobupal, Flaxen, Levest, Vandral, Venlabrain, Venlamylan, Venlapine y Zarelis.

Ahora bien, como el principio activo de este fármaco es la Venlafaxina, también puede ser adquirido mediante presentaciones genéricas del producto, las cuales se pueden encontrar para su toma oral mediante cápsulas que vienen de 37,5 mg a 150 mg aproximadamente, según cada laboratorio.

La dosis adecuada para cada paciente debe ser establecida de manera personal por el médico tratante, sin embargo generalmente se sugiere lo siguiente:

  • Cuando se trata de Venlafaxina de liberación normal, suele indicarse de manera inicial 37,5 mg cada doce horas; a partir de allí la dosis será incrementada progresivamente para que el paciente se adapte a ella, cada cuatro o siete días, sin pasar de un máximo considerado para la dosis diaria de 150 mg, tomado cada ocho horas.
  • Si se trata de Venlafaxina de liberación prolongada, donde el medicamento libera una parte como dosis inicial y el resto lo va liberando lentamente, para que con ello se emplee menor cantidad del fármaco en cada dosis. Se indican 75 mg tomados cada veinticuatro horas, los cuales pueden ser aumentados luego de un par de semanas, pero sin que se lleguen a sobrepasar los 150 mg al día.

Venlafaxina

Efectos secundarios

La Venlafaxina como fármaco antidepresivo, contiene componentes químicos que son ingeridos por el paciente, como parte de un  tratamiento para controlar su trastorno nervioso; pero que por otro lado puede ocasionar dentro de su organismo, una serie de trastornos o efectos secundarios que podrían ser tanto leves como graves.

No a todos los pacientes el medicamento les afecta de la misma manera, sin embargo se sugiere que ante cualquier síntoma fuera de lo común, como los que mencionamos a continuación, se comunique inmediatamente con su médico tratante, para que evalúe y cambie la dosis de este medicamento en caso de ser necesario.

Entre los síntomas que pueden experimentar los pacientes de manera leve, muchos de los cuales desaparecen por sí solos, están los siguientes:

  • Somnolencia, debilidad, cansancio y presencia de posibles mareos, con vómitos o dolores a nivel estomacal, incluso podrían presentarse muchos eructos, gases y acidez.
  • Dolores de cabeza y pesadillas.
  • Cambios en la apreciación del sabor de las cosas, falta de apetito, pérdida de peso, resequedad en la boca.
  • Temblores incontrolables en algunas partes del cuerpo.
  • Frecuentes ganas de orinar.
  • Espasmos o tensiones a nivel muscular.
  • Diarreas, o en caso contrario estreñimiento.
  • Aumento de la sudoración.
  • Entumecimiento del cuerpo, hormigueo, ardor o dolor en cualquier parte del organismo del paciente.
  • Malestares en la garganta, escalofríos o signos representativos de una infección.
  • Zumbido en los oídos, dilatación de las pupilas o constantes bostezos.

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Otros síntomas han sido considerados como graves, los cuales requieren la pronta intervención del médico tratante para evitar daños mayores en el organismo del paciente, al respecto se pueden mencionar los siguientes:

  • Erupciones en el cuerpo, con urticaria o comezón.
  • Dificultades para respirar al igual que tragar, con dolor en el pecho.
  • Latidos del corazón alterados, con presencia de arritmias cardíacas.
  • Convulsiones, fiebre o moretones con presencia de hemorragias anormales.
  • Dolor a nivel de los órbitas oculares, con posible enrojecimiento de los ojos.
  • Alteraciones de la visión.
  • Falta de coordinación, dificultades al caminar o al realizar los movimientos normales de cada una de las articulaciones.
  • Alucinaciones y otros trastornos en los cuales se crea oír voces que no existen.
  • Pérdida del conocimiento o desmayo, incluso entrar en estado de coma.

Ante cualquiera de estos síntomas en importante acudir a los servicios de emergencia, para que pueda ser rápidamente atendido.

Contraindicaciones de la Venlafaxina

La Venlafaxina no debe ser empleada con pacientes que tengan hipersensibilidad a su componente activo, pues podría ocasionarles un grave trastorno alérgico.

Tampoco debe ser empleado con personas que estén consumiendo inhibidores de la IMAO, que son otros antidepresivos con actuación sobre la monoaminooxidasa, considerados como de primera generación en este tipo de tratamientos.

En el caso de pacientes que presenten insuficiencia hepática o insuficiencia renal, la Venlafaxina debe ser empleada con mucha precaución, debido a que este fármaco es metabolizado a nivel del hígado y posteriormente es eliminado mediante la orina, casi sin alteraciones.

Al respecto se considera que tiene un tiempo de eliminación de entre 5 y 11 horas, lo cual es afectado por la disfunción renal o hepática que presente el paciente.

Se debe evitar su uso con pacientes que sufren de glaucoma, un trastorno ocular asociado con la presión dentro del ojo, ante lo cual la ingesta de la Venlafaxina podría ocasionar tener que aumentar el control ocular de este tipo de pacientes.

Adicionalmente, este medicamento está contraindicado para pacientes menores de 18 años, debido a que puede ocasionar alteraciones en su organismo, que les lleven a tener ideas y comportamientos suicidas.

Otra de las contraindicaciones sobre el uso de este fármaco es tener presente la interacción con otros medicamentos, incluso de tipos naturales, como en el caso de la hierba de San Juan, que suele ser empleada como antidepresivo.

También se puede alterar la acción de fármacos como Bupropión o Tramadol, empleados para el control de convulsiones, cuando son administrados de forma simultánea con la Venlafaxina.

Embarazo y Lactancia 

En la actualidad no existen suficientes estudios referentes a la medicación de Venlafaxina en mujeres embarazadas; no obstante algunas publicaciones e investigaciones documentan el hecho de que su consumo duplique el riesgo de sufrir un aborto espontáneo.

Por lo que se sugiere que este medicamento, al igual que la mayoría de los antidepresivos, no sean consumidos por las mujeres embarazadas a menos que el médico tratante considere que el beneficio para la madre es mayor que el perjuicio para su bebé.

Por otro lado, generalmente este tipo de medicamento es excretado mediante la leche materna, con lo cual estaría pasando al organismo de su bebé durante la lactancia, por lo que se recomienda evitar la medicación mientras se encuentre lactando.

Asimismo se recomienda a todos los pacientes a los cuales sea recetada la Venlafaxina para el tratamiento de cualquier patología nerviosa que estén sufriendo, que antes de iniciar el consumo de este medicamento lean detenidamente el prospecto adjunto en su empaque, para que pueden tener a la mano toda la información necesaria sobre el fármaco.

Igualmente es importante que cuando se vaya a dejar de consumir la Venlafaxina, su retirada se realice de manera progresiva, en vista de que se trata de un medicamento que crea dependencia y que si se deja de consumir de manera abrupta, se corre el riesgo de sufrir síndrome de abstinencia. Precaución ante todo, y evite la automedicación.

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Si en el contenido de este artículo le ha permitido conocer más sobre la Venlafaxina, le sugerimos la lectura informativa de los siguientes productos farmacéuticos: