La neuritis, todo sobre la inflamación de los nervios y sus tipos

Aprende sobre la neuritis, la inflamación crónica de un nervio, sus causas, síntomas, complicaciones y cómo tratarla. En este artículo conocerás todo lo que necesitas saber. Entérate aquí.

Neuritis

 ¿Qué es la neuritis?

La neuritis es la inflamación de un nervio y sus ramificaciones, ocasionando varios trastornos patológicos como dolor punzante, parestesia o sensación de hormigueo, así como aumento o falta de sensibilidad en el sector del organismo afectado.

El vocablo “neuritis” proviene del griego e incluye dos componentes léxicos: neuron que significa “nervio” e itis que denota “inflamación”. Otro tipo de afección frecuente es El Divertículo de Meckel.

En ocasiones se ha empleado este término como sinónimo de neuropatía, lo cual no es apropiado, ya que realmente esta última está más bien relacionada con la disfunción, daño o degeneración de un tejido nervioso, y no con la inflamación en sí, que es la neuritis.

Neuritis

Probablemente, la neuritis podría avanzar, según las circunstancias de tratamiento de la afección, y llegar a convertirse en una neuropatía.

Cuando solo un nervio es afectado, esa condición es llamada “mononeuritis”. En los casos en que son varios los nervios aislados involucrados de manera simultánea se le denomina “mononeuritis” múltiples.

Mientras que si son nervios muy separados entre sí, se refiere a una “polineuritis”, o si es una red de nervios, se le conoce como “plexitis”. Te interesa saber de Hernia Crural.

Tipos de neuritis

Son varios los tipos de neuritis que han sido identificados, según la zona afectada. Así también hay algunos tipos que están asociados a síndromes específicos más severo, según su frecuencia y relación con otros signos y síntomas.

En tal sentido, se han identificado varios tipos de neuritis, siendo los más habituales la neuritis óptica y la vestibular, que son los que analizaremos en este post.

Neuritis

Sin embargo, a titulo informativo, se listan a continuación las otras variedades de neuritis conocidas que existen:

  • Neuritis intercostal: Dolor nervioso localizado desde la columna vertebral hasta el esternón.
  • Neuritis braquial: Alteración neuromuscular del hombro, caracterizada por un brusco dolor muy intenso acompañado de debilidad muscular.
  • Polineuritis múltiple: Disfunción simultánea de muchos nervios periféricos en todo el cuerpo.
  • Neuritis cubital: Daño en el nervio cubital, que va hacia abajo desde el brazo hasta la muñeca, y los dedos anular y meñique.
  • Neuritis lumbosacral: Inflamación de los nervios espinales.
  • Polineuropatía sensitivomotora:  Afección que disminuye la capacidad para moverse o sentir (sensibilidad) debido a un daño neurológico.
  • Neuritis occipital: Fuerte dolor en la parte posterior de la cabeza o la base del cráneo por inflamación de los nervios occipitales.

Neuritis

Neuritis óptica

Es la que se produce cuando el nervio óptico se inflama produciendo dolor ocular al hacer algún movimiento de los ojos, así como trastornos de la visión, tal como la pérdida temporal de la misma en uno de los ojos.

El nervio óptico está formado por una serie de fibras nerviosas que son las encargadas de llevar la información visual del ojo al cerebro, de allí que la hinchazón reduzca el campo visual.

Cuando se sufre de solo un episodio de neuritis óptica, es posible eventualmente recuperar la visión sin tratamiento, aun cuando los medicamentos a base de esteroides pueden ayudar a la recuperación de la visión más rápidamente.

Neuritis

Ahora bien, estos síntomas de la neuritis óptica pueden ser indicios de una esclerosis múltiple, o, incluso, aparecer más adelante cuando ya está presente esta enfermedad ocasionando inflamación y daño a los nervios del cerebro y al nervio óptico.

Además de la esclerosis múltiple, la inflamación del nervio óptico puede ocurrir con otras afecciones, incluidas infecciones o enfermedades inmunitarias, como el lupus.

Neuritis vestibular

Esta afección afecta al aparato vestibular del oído interno y que está asociado con el equilibrio. A menudo se emplea neuronitis vestibular para referirse a este mismo síndrome clínico.

Se caracteriza por la ocurrencia de mareos, que los especialistas atribuyen a una infección viral del nervio vestibular, que es el encargado de llevar la información de los movimientos de la cabeza desde el oído interno hasta el cerebro.

Neuritis

Al inflamarse uno de los dos nervios vestibulares, se genera un desequilibrio entre ambos oídos, el cual conlleva al vértigo. El daño o hinchazón del nervio vestibular puede afectar las neuronas sensoriales del ganglio vestibular.

En vista de que las neuronas vestibulares son distintas a las cocleares por su ubicación en el tronco cerebral, hace más probable que ocurra esta afección del nervio vestibular sin la pérdida auditiva.

Causas

En la mayoría de los pacientes con neuritis, tanto óptica como vestibular, no se ha podido establecer la causa exacta de su aparición, por lo que, por lo general, sigue siendo incierta.

Neuritis

No obstante, los especialistas de la salud han señalado que aquellas enfermedades que afectan el suministro de sangre a los nervios, enfermedades autoinmunes, lesiones, infecciones y la deficiencia de ciertos nutrientes podrían ser algunos de los factores que han contribuido al desarrollo de estas neuritis. Entre ellos tenemos:

Lesiones en el nervio

Generan inflamación y los síntomas que de ella se derivan. Pueden provenir de diversos agentes, tales como:

  • Daños físicos debidos a la compresión del nervio provocando su inflamación, lo que conlleva dolor.
  • Daños químicos ocasionados, por ejemplo, por la administración de ciertos medicamentos como los de la quimioterapia, que generen inflamación de los nervios.
  • Lesiones por radiación que pueden hinchar el nervio después de la radioterapia para varios tipos de cáncer.

Neuritis

Deficiencias nutricionales

La carencia de complementos multivitamínicos puede ser causa posible para que se desarrolle la neuritis, como, por ejemplo, la falta de vitamina B como la vitamina B1 (tiamina), B2 (riboflavina), B6 ​​(piridoxina) o B12 (cianocobalamina) en la dieta diaria.

Enfermedades predisponentes

Son aquellas inciden en la aparición de la lesión. Entre ellas tenemos:

  • Diabetes mellitus
  • Hipotiroidismo
  • Enfermedades autoinmunes como esclerosis múltiple, sarcoidosis y lupus eritematoso sistémico.

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Heredados

Se transmiten genéticamente. Se incluyen:

  • Neuropatía óptica hereditaria de Leber (LHON) Polineuropatía amiloide
  • Enfermedad de Charcot-Marie-Tooth.

Síntomas de la neuritis

Los síntomas de la neuritis dependen del nervio o grupo de nervios afectados. Los síntomas comunes de estas neuritis generalmente localizadas en el área afectada incluyen:

  • Dolor punzante, que normalmente empeora por la noche y se agrava con el contacto o con los cambios de temperatura.
  • Parestesia, que puede producir sensaciones de hormigueo o de ardor.
  • En los casos de más gravedad, es posible pérdida de sensibilidad, hinchazón.

Neuritis

Para la neuritis óptica

Con respecto a la neuritis óptica, por lo general, los pacientes que la sufren ven afectados un solo ojo y puede ser una afección ocular grave, sino se le atiende debidamente, ya que puede provocar la pérdida permanente de la visión y otras lesiones asociadas con otros problemas médicos graves. Por ello, es importante acudir al médico cuando se presentan síntomas como:

  • Dolor, que se percibe en la parte posterior del ojo, o alteraciones visuales de grados variables.
  • Pérdida o reducción temporal de la visión en un ojo, que se va agudizando con el paso de las horas o los días, pero que mejora con el transcurso de varias semanas o meses.
    • Sin embargo, hay casos en que la pérdida es permanente en algunas personas.
  • Pérdida de la visión de ambos ojos, o visión doble, o borrosa o distorsionada.
  • Los síntomas empeoran o no mejoran con el tratamiento.
  • Ráfagas de luz o luces centelleantes al mover los ojos, o problemas de ajuste a la luz brillante u oscuridad.
  • Pérdida del campo visual, que puede ser de la visión central o de la periférica.
  • Pérdida de la visión del color (cromática), afectando la percepción de la nitidez o brillo de los colores.

Para la neuritis vestibular

En cuanto a la neuritis vestibular, el principal síntoma que se padece es el mareo o el vértigo y los trastornos asociados a la pérdida del equilibrio.

El vértigo se presenta de forma súbita que puede durar unas 24 a 48 horas con náuseas y vómitos. También ocurren episodios de inestabilidad y tendencia a caerse por lo general hacia el lado donde ha ocurrido la neuritis.

El paciente, asimismo, siente que todo le da vuelta, sensación que va a durar por cierto tiempo hasta que desaparece.

Luego de superar ese episodio, la persona se siente insegura e inestable con miedo a levantarse por miedo a caerse. El vértigo puede volver a repetirse de manera más leve, pues hay descompensación en los oídos.

Es de acotar que no hay pérdida auditiva o ruido en el oído, es por ello que no se le debe confundir con la enfermedad de Ménière u otras afecciones aceleradas que implican sordera.

La persona padece los primeros días un cuadro clínico de nistagmo, o movimiento ocular descontrolado. Así es posible encontrar pacientes con neuritis en el nervio vestibular derecho, moviéndose los ojos con rapidez.

Neuritis

Diagnóstico y tratamiento

En general, se pueden prescribir analgésicos para mitigar el dolor y contribuir con la recuperación rápida de los casos menos severos.

Así, también es posible recurrir a la prescripción de antiinflamatorios, aun cuando se ha observado que con el tiempo, la inflamación suele ir remitiendo y desaparecer.

Para la neuritis óptica

En cuanto a la neuritis óptica, se ha podido observar que algunas personas mejoran sin ningún tratamiento. Otras, por el contrario,  necesitan tratamiento para mejorar la visión o, al menos, evitar que los síntomas empeoren.

En general, se prescriben comúnmente medicamentos corticoesteroides, que ayudan mucho a mejorar la visión, llegando incluso a restaurar el estado en que se encontraba antes de la afección.

Sin embargo, las personas con esclerosis múltiple u otras afecciones más complicadas, el tratamiento no ofrece iguales resultados.

En todo caso, lo recomendable ante los síntomas de neuritis óptica, es consultar con un oftalmólogo, quien prescribirá el tratamiento idóneo para prevenir que los síntomas empeoren y hasta podría salvarle la visión.

 

Para la neuritis vestibular

En cuanto a la neuritis vestibular, en los casos habituales complicados, los especialistas, como los neuro-otólogos y oto-neurológos son los llamados a efectuar el diagnóstico, quienes prescribirán la medicación más apropiada, de ser necesario.

En gran parte, el diagnóstico permite determinar las manifestaciones clínicas de la lesión a nivel de uno o de otro nervio vestibular.

Esta neuritis es tratada de manera sintomática con medicación anti-emética para las náuseas y supresores vestibulares para reducir los vértigos. Las clásicas medicaciones más empleadas son: meclizine, lorazepam, promethazine,  prochlorperazine y diazepam.

neuritis

Cuando se trata de una laberintitis aguda, se agrega amoxicilina, en caso de sospecha de una infección del oído medio, que produzca dolor o presencia de líquido, enrojecimiento o pus detrás del tímpano, según lo que arroje la otoscopia.

De ser crónicos los vómitos en el paciente, será, entonces, imperativo el ingreso del paciente al hospital para un tratamiento más severo con medicación y fluidos endovenosos.

La permanencia hospitalaria debe ser breve, solo por el tiempo suficiente para re-hidratar al paciente y administrar el debido tratamiento con el cual prevenir los vómitos.