La aromaterapia es una técnica empleada en la medicina alternativa que consiste en la utilización de materiales aromáticos como los aceites esenciales para el mejoramiento de la persona a nivel físico y mental. En el artículo de hoy nos dedicaremos a explorar todo lo referente a este método dentro de la medicina moderna.
¿Qué es la aromaterapia?
La aromaterapia es entendida como un método dentro de la medicina alternativa que se basa en la utilización de materiales aromáticos como los aceites esenciales y otros recursos con el objetivo de causar alivio físico y psicológico a la persona. Sin embargo, no se ha encontrado evidencia de que esta técnica garantice dichos efectos.
En este método se emplean aceites esenciales y otros producto que son un derivado de vegetales que alegan ser para fines de terapia y que posteriormente son administrados de diferentes formas como la inhalación, tópica, interna (oral, anal, vaginal) o durante la ducha.
En líneas generales, no hay evidencia alguna que demuestre que la aromaterapia sirve de alguna manera para mejorar o prevenir una afección. Existen evidencias que demuestran que la misma ocasiona náuseas y vómitos luego de las cirugías.
Por los momentos, esta técnica es recomendada como un tratamiento complementario para ciertas enfermedades o como método de la medicina alternativa. Son muy raros los casos en los cuales se emplea esta terapia como primer medida de curación.
Historia
La utilización de aceites esenciales para fines de terapia, higiene, ritual y espiritual tiene sus inicios en la antigüedad por parte de los chinos, los indios, los egipcios, los griegos y los romanos que los empleaban para la producción de perfumes, cosméticos e incluso drogas.
El filósofo Dioscórides hace la descripción del uso de estos aceites como medio curativo para la época en la que se encontraba (siglo I). Asimismo, en el siglo XI dichos aceites eran usados como medicamentos que eran destilados y presentarlos como vapor.
Entrando en el momento de la medicina moderna, la aparición de este método como medida de tratamiento empieza a ser revuelo en el año 1937 cuando fue mencionado en un libro francés llamado Aromathérapie: Les Huiles Essentielles, Hormones Végétales escrito por el químico René-Maurice Gattefossé.
Según se sabe, en el año 1910 Gattefossé se quemó gravemente la mano y alegó haberla tratado de manera exitosa por medio de los aceites esenciales de lavanda. A raíz de este hecho fue lo que lo llevó a estudiar acerca de la composición química de estos productos y sus propiedades medicinales.
Años después, un médico cirujano de la armada francesa Jean Valnet, empleó dichos materiales como antisépticos para poder curar a los soldados heridos en la Segunda Guerra Mundial. Para el año 1964 Valnet publicó Aromathérapie, que hasta el día de hoy se considera una literatura importante para el estudio de la aromaterapia.
¿Para qué se utiliza?
El uso de la aromaterapia se ha implementado para diversas situaciones, a pesar de que no existe evidencia científica de su efectividad muchas personas recurren a ella como tratamiento curativo para enfermedades como la artritis, los dolores musculares y articulares, los reumatismos, la bronquitis, los calambres, la gripe, la celulitis, la resaca, la dermatitis y el estreñimiento.
Científicos que se han dedicado a la investigación acerca de este medio de terapia en la medicina han argumentado que es posible que dichos efectos sanadores se deban en su mayor medida a un “efecto placebo”, es decir, es más un creencia que se hace la persona mentalmente que un hecho físico.
Otro medio para cual se ha utilizado esta técnica es como tratamiento de apoyo de enfermedades como el cáncer. En algunos casos, el uso de la aromaterapia se ha recomendado como un medicamento para aliviar los síntomas de la afección o los efectos secundarios producidos por los medicamentos agresivos recetados.
Asimismo, este método también se ha recomendado para fines psicológicos como un medio relajante, estimulador, afrodisíaco y antidepresivo para la mente.
Los aceites esenciales de la aromaterapia
Los aceites esenciales o también conocidos como aceites volátiles, son los materiales básicos que se utilizan en las sesiones de aromaterapia y que están hecho a partir de las fragancias y esencias que desprenden ciertas plantas.
Su elaboración se realiza por medio de las células especiales de las plantas que habitualmente se encuentran de bajo de la superficie de las hojas o la corteza, por medio de la energía que brinda la luz del sol, el aire, el agua y la misma tierra.
Cuando se exprime la planta la misma libera la esencia y su fragancia única. De una misma manera, cuando estas son extraídas de forma natural, es decir, al emplear el agua, el vapor o en una prensa mecánica sin la utilización de procesos químicos, se obtienen los verdaderos aceites esenciales.
Los aceites que se utilizan en mayor medida en las sesiones de aromaterapia son la manzanilla romana, el geranio, la lavanda, el árbol del té, el limón, el cedro y la bergamota. Los mismos son muy volátiles y concentrados, por lo que se evaporan con rapidez al ponerlos en el aire.
¿Cómo funciona?
La técnica de la aromaterapia está basada en el sentido del olfato. Los aromas de los aceites entran por la nariz hasta llegar a la mucosa olfativa, lugar en donde se ubican las células olfativas sensoriales, las células de sostén y las células basales, las cuales son las responsables de la captación de los olores y su transmisión neuronal.
El moco acuoso es el encargado de llevar los aromas de los aceites hacia los cilios, que se entienden como pequeños apéndices móviles de tamaño medio que se encuentran dentro de las células y cuya función es transformar los aromas en señales químicas.
Luego de esto, dichas señales químicas son enviadas hacia el sistema límbico y al hipotálamo por medio de una células receptoras especializadas. Solo es cuestión de un poco de tiempo para que las señales lleguen a la corteza cerebral y así tomar conciencia del olor percibido.
Dichas percepciones realizan diferentes tipos de estimulaciones en el cerebro humano, es decir, pueden ocasionar un efecto relajante o incluso despertar algún recuerdo, esto se debe a que la captación de los olores se hace en el sistema límbico, lugar en el cual se sabe que ocurre el procesamiento de las experiencias vívidas de una persona.
Una de las formas más recurrentes de aplicar estos aceites es vertirlos en el agua caliente, de esta manera el vapor de la misma más los aromas que desprenden los materiales impactan en la nariz. Este tipo de inhalación puede darse de manera directa o indirecta, dependiendo de la situación ambiental (si se encuentran en un lugar abierto o cerrado).
Otra poca habitual de aplicar dichos aceites es de forma directa sobre la piel y al mismo tiempo se realiza una combinación con aceites vehiculares que van de acuerdo a la necesidad del individuo. Esta medida resulta efectiva ya que la piel se encarga de proteger al cuerpo de sustancias nocivas de las plantas y solo absorbe los componentes positivos.
Si en el caso contrario solo se aplicaran los aceites esenciales sobre la piel de la persona, los mismos podrían ocasionar efectos nocivos como quemaduras o irritaciones.
El nervio olfatorio
El nervio olfatorio o también llamado olfativo es el primero y el más corto de los nervios de los pares craneales (pares de nervios que surgen del cerebro). Su origen se encuentra en las células bipolares localizadas en el epitelio olfatorio el cual cubre la gran parte del cornete superior y la pared opuesta al tabique en las fosas nasales.
La característica primordial de este nervio es que es únicamente sensorial, conduce los impulsos olfativos de la nariz hacia el sistema nervioso central, siendo catalogado como fibras aferentes viscerales especializadas.
Estas fibras especializadas es posible encontrarlas en toda la mucosa pituitaria (cavidades separadas en el área del tabique), extendiéndose de forma central y periférica, siendo de esta forma verdaderas células nerviosas semejantes de las células del Ganglio de Corti y del Ganglio de Scarpa de la vía auditiva e iguales a las celulas ubicadas en los ganglios espinales.
Ha sido todo por el artículo de hoy, esperamos que la información proporcionada le haya servido de ayuda. Le hacemos la invitación a leer también: daclizumab y golimumab
Actualizado el 31 enero, 2022
